La Mazorca de Macri - Una fuerza de pequeños y medianos emprendedores

Tras cuatro meses en la calle, los jefes de la Metropolitana definen su perfil mercantilista.


Macri supo enarbolar la lucha contra el delito como su bandera más preciada. Ahora, su política de seguridad puede ser la tumba

La escena transcurría en el despacho principal de Bolívar 1. Mauricio Macri estaba absorto en la lectura de una hoja que sostenía entre sus dedos. Y su guía espiritual, el ecuatoriano Jaime Durán Barba, le susurró al oído:
–Tu imagen está intacta.
En ese instante, un funcionario se permitió una humorada: “Si a Mauricio le diagnosticaran una enfermedad venérea, en vez de tomar penicilina ordenaría una encuesta”. La broma no fue festejada.
Lo cierto es que el mandatario porteño aún creía que la reapertura del Teatro Colón lo había catapultado a la gloria. Sin embargo, por esas mismas horas la Defensoría del Pueblo de la Ciudad anunciaba que investigará los motivos por los que el gobierno macrista cedió los derechos de transmisión a una emisora privada, mientras el arco opositor daba forma en la Legislatura a un pedido de informes al respecto. Ello sólo fue el comienzo de una semana calamitosa para el heredero de Don Franco. Horas después, su figura sería vapuleada durante una audiencia pública en el Tribunal Superior de Justicia, a raíz de una causa por “conflicto de poderes” iniciada con su propia denunciacontra los jueces que se opusieron a la designación como presidenta de ese mismo tribunal de la cuestionada fiscal Daniela Bruna Ugolini. En paralelo, la Sala VI de la Cámara del Crimen anulaba el sobreseimiento de Macri en una causa penal por haber direccionado la licitación del mobiliario urbano para beneficiar a una empresa amiga (ver recuadro). A ello se le agregaría el lapidario rechazo del juez federal Norberto Oyarbide a la recusación presentada por el ex presidente de Boca en la causa del espionaje telefónico. Tanto es así que no dudó en responsabilizarlo de “querer contaminar la investigación” mediante los dichos del ex senador entrerriano y fugaz subjefe de la Side, Héctor Maya, quien, a raíz de un supuesto encuentro con Oyarbide, le atribuyó la siguiente frase: “A Mauricio me lo llevo puesto”. La maniobra –tal como adelantó Miradas al Sur el domingo pasado– fue urdida por Miguel Ángel Toma y contó con la colaboración del prestigioso animador Jorge Rial, en cuyo programa radial se difundió el embuste.
Semejantes circunstancias coinciden con la efeméride más preciada del calendario macrista: los primeros cuatro meses de la Policía Metropolitana en la calle. Ello, más que un logro organizativo, es casi un milagro celestial. Y no sólo por el alud de contratiempos que atravesó la gestación de la criatura –la renuncia de su primer jefe, el encarcelamiento de éste, la eyección de su sucesor por el affaire de las escuchas, sin soslayar las supuestas irregularidades en la compra de equipos– sino porque, además, la Mazorca de Macri pudo sobrevivir a su debut sin cosechar víctimas fatales ni haber incurrido en otras desgracias.
Sin embargo, en sus entrañas late una bomba de tiempo.

El monje negro. No hay demasiada información acerca de los resultados de la Metropolitana en su guerra contra el crimen. Su usina de prensa sólo deslizó unas 68 detenciones –un promedio de 17 por mes–, sin especificar fechas, lugares ni situaciones. Se sabe, en cambio, que un patrullero de esa fuerza sufrió el robo de sus ruedas traseras, y que tal delito aún no fue esclarecido. Lo cierto es que los efectivos en actividad de la agencia policial porteña –alrededor de 500, por ahora– circunscriben su accionar en unas pocas calles de la Comuna 12 –barrios de Villa Urquiza, Saavedra, Villa Pueyrredón y Coghlan–, únicamente para intervenir en infracciones de carácter contravencional, como ser la alteración del orden público o la ocupación ilegal de una propiedad. Por ello, sus blancos no son peligrosos malvivientes sino simples alborotadores, vendedores ambulantes, indigentes, ebrios e insanos.
Pese a ello, el jefe de la flamante milicia, Eugenio Burzaco, diría en una entrevista radial: “Hay que tratar de trabajar en un modelo de seguridad distinto, más preventivo, con tecnología para entender cual es la dinámica del delito; salir a buscarlo, y no estar corriendo siempre atrás de los problemas”.
En ello ya trabajan sus oficiales.
De hecho, en el campus del Instituto Superior de Seguridad Pública ya se entrena un grupo de choque que reemplazaría a la ya fenecida Ucep en el desalojo violento de cirujas y crotos que pernoctan a cielo abierto. Las enseñanzas están a cargo del comisario retirado de la Federal, Héctor Oscar Morosi. El Chino –tal como lo llaman en el mundillo policial– integró en sus años mozos la peligrosísima Dirección de Investigaciones Políticas Antidemocráticas (Dipa), una de las ramas de Coordinación Federal. Su desembarco en la Metropolitana fue obra del segundo de Burzaco, el superintendente Héctor Barúa.
En los pasillos de la Metropolitana se dice que, mientras el ex diputado se encarga del aspecto protocolar de la fuerza, es Barúa quien en realidad se ocupa de regir su destino.
Aún sin estar formalmente designado, ese sujeto con fama de ciclotímico y autoritario ocupa el sillón que dejó vacante Osvaldo Chamorro. El Turco –tal como lo llaman sus acólitos– es un gran aficionado a las mesas de poker y está ligado a Jorge Fino Palacios a través de un inquebrantable lazo de camaradería y amistad. Barúa, que se retiró de la Federal en 1999, fue hombre de confianza de los ex jefes policiales Horacio Varela y Baltasar García. Ocupó la Superintendencia de Personal, después de haber pasado por las áreas de Comisarías, Inteligencia, Administración y Ayudantía de la Jefatura de la Federal. Además, es un próspero empresario en el rubro de la seguridad. En el pasado fue accionista de la desaparecida empresa Piscis Seguridad SRL y, en la actualidad, se lo vincula a la agencia Serpico SA, continuadora de Piscis en el horóscopo de la vigilancia privada. Pero no son los signos del zodíaco sino el azar lo que ha determinado su crecimiento patrimonial. Sérpico provee seguridad a varios bingos y salas de juego como National Game (Bingo Congreso), la Unión Transitoria de Agentes SA (Bingo Flores), Lamartine SA (Bingo Belgrano), Royal Ascot (Agencia Hípica) y Argenbingo (Bingo Familiar), entre otras. La idea de colocar agencias de seguridad “amigas” en lugares claves es ahora una suerte de política de Estado. Aunque no puede decirse que ello sea un hallazgo de Burzaco sino que fue parte de la estrategia de Palacios para obtener información. En todo caso, la originalidad del actual jefe de la Metropolitana consiste en apostar al juego como prenda de paz entre su fuerza y la Federal. En tal sentido, Barúa no es precisamente un cuatro de copas, sino que como todo buen jugador tiene varios ases en la manga. Además de su conocida afición por las mesas de felpa verde, Barúa también es un hombre de buen comer: tiene –a través de su esposa– participación societaria en cuatro restaurantes de Puerto Madero: Sorrento, Puerto Cristal, Portofino y El Porteño. Sin dudas, a Barúa le ha sonreído la fortuna; ahora le sonríe Burzaco.

Alegre milicia de hombres armados. En el plano comercial, no le va a la zaga el próspero superintendente de Comunicaciones, Eduardo Martino, quien –como se sabe– ha sido denunciado en la Legislatura por “ejercer actividades privadas incompatibles con la función pública”, a raíz de que, en paralelo a su trabajo policial, regentea su propia agencia de seguridad, Alesa SA., además de administrar un balneario en Miramar, del cual también es dueño. Pero a la vez tiene el mérito de haber volcado su destreza para los negocios en beneficio de la Metropolitana. Tan es así que –según una fuente del Ministerio de Seguridad– ha sido el factotum de importantes compras de equipos y acuerdos adjudicatorios como la de las comunicaciones troncales por unos 10 millones de dólares, a través del ya clásico sistema de compra directa. Cabe destacar que Martino fue eyectado de la Policía Federal por enriquecimiento ilícito, en la famosa purga de 2004, junto con muchos otros comisarios cercanos al Fino; entre ellos, Alberto Insúa.
Éste, además de ser –con el grado de comisionado general– el segundo de Martino en Comunicaciones, es su socio en la esfera privada. En tal sentido, trascendió un negocio en el que Barúa tampoco es ajeno: brindar a las agencias del ramo, a través de un módico cánon, un servicio de conexión con el sistema de alarmas de la Metropolitana.
En el staff de dicha fuerza también descuella otro ex federal –y otrora socio de Martino– también echado en 2004 por enriquecimiento ilícito; se trata de Héctor Oscar Sanguinetti, quien –según una misiva enviada a la Defensoría porteña por la llamada Comisión de Inspectores y Comisionados de la Policía Metropolitana– durante la dictadura habría integrado la Superintendencia de Seguridad Federal –el brazo represivo de la policía–, prestando, siendo, incluso, enviado a prestar servicios “en comisión” al Batallón 601. Su llegada a la Metropolitana, en donde obtuvo grado de comisionado mayor, se debe nada menos que a los buenos oficios de Barúa.
Lo cierto es que, a casi nueve meses de la caída del Fino, el influyente Turco ha nutrido la segunda línea de la Metropolitana con oficiales afines a su persona, quienes conviven en idílica armonía con los sobrevivientes de la línea Palacios.
El ya mencionado Morosi es uno de ellos. Otro, un tal Chicota Vázquez, quien en sus días en la Federal se encargaba –según una fuente de la Comisión de Inspectores y Comisionados– a la loable tarea de recaudar las cajas del juego clandestino y la prostitución. No es descabellado suponer que en su nuevo trabajo hará lo mismo, y quizás en ello lo secunde un viejo conocido suyo, el ex comisario Cóppola, oportunamente procesado por trapisondas cometidad cuando era el titular de la comisaría 12. Hace unos días, se lo vio salir sonriente del despacho de Barúa. Otro golden boy convocado por el jugador de poker es el ex comisario Ricardo Cajal, a punto de convertirse en comisionado mayor de la Metropolitana. Se trata de un viejo pájaro de cuentas, cuyas tareas recaudatorias se circunscribían a los saunas, a los peajes que solían tributarle los habitantes de edificios ocupados en juridicción de la comisaría 2, desde donde, además, reclutaba bandas de escruchantes que actuaban en edificios de la zona. El entonces juez Luis Cevasco lo procesaría por ello. Éstos son algunos de los cuadros policiales de la fuerza de seguridad más nueva del país.
Al respecto, Burzaco fue elocuente: “El avance del crimen organizado va transformando el panorama delictivo. Sobre ello tenemos que actuar con rapidez”.
Si él lo dice....

Bicentenario - Carrozas de fuego

Paso a paso, idea por idea, cómo se concibió el desfile final que terminó en asombro masivo.



La historia comenzó la segunda semana de julio de 2009. Jorge Coscia había asumido el 8 como secretario de Cultura nacional en reemplazo de José Nun. “La cultura es una herramienta fundamental en un proyecto de transformación nacional”, dijo al jurar. A los pocos días, la presidenta Cristina Fernández, el Secretario General de Presidencia Oscar Parrilli y el flamante secretario se reunían para delinear los Festejos. “Debe ser una conmemoración para crear memoria colectiva”, les dijo Cristina a sus funcionarios. “Sobre todo, tenemos que hacer una celebración participativa, pluralista, federal y latinoamericana.”
Se sabía desde entonces y desde antes que no se replicarían gestos como los del Centenario, como por ejemplo cuando el presidente Figueroa Alcorta puso la piedra inicial de la Pirámide de la Plaza de Mayo junto con la Infanta Isabel de Borbón. Lejos se estaba también del espíritu que estableció el estado de sitio para reprimir cualquier atisbo de la huelga general que preparaba la Fora, la Federación Obrera, a comienzos de ese siglo XX ultraconservador.
“A diferencia del 1910, el Bicentenario no está centrado exclusivamente en Buenos Aires. Queremos mostrar un país que a futuro quiera apropiarse de la cultura, la ciencia y la tecnología”, dice Gustavo López, subsecretario general de Presidencia y el encargado de coordinar los cauces interprovinciales del Festejo. El 25 de mayo fue el ápice, pero ni el principio ni el fin del Bicentenario. A comienzos de este año, Mar del Plata abrió el telón de los Festejos junto al mar. “El Bicentenario comenzó en enero. Tuvieron que salir 2 millones de personas a la calle para romper el dique informativo”, dijo Coscia a este semanario.
“Si hago esto en Brasil, tendríamos 100 muertos”, le soltó Lula a Cristina, emocionado, antes de irse. Chávez estaba exultante: “Hemos visto una revolución emotiva, una revolución de la alegría social”. El 25 de mayo pasado, Argentina pareció sacudirse definitivamente la modorra y salir del closet. A la calle, a la vida social, que es la vida por antonomasia.
El itinerario de la idea del Desfile del Bicentenario continuó el 30 de diciembre de 2009, cuando al decir de Coscia, los mosqueteros Parrilli, el presidente del Sistema Nacional de Medios Públicos, Tristán Bauer y él mismo encontraron su D'Artagnan. Con el decreto presidencial 1.358, Javier Alberto Grosman era nombrado director ejecutivo de la Unidad Ejecutora Bicentenario de la Revolución de Mayo 1810-2010. Se pusieron manos a la obra de inmediato. Grosman impuso el nombre de Diqui James, fundador y director artístico de Fuerza Bruta. La madre de James es hermana de Manuel Evequoz, el militante de Montoneros desaparecido durante la última dictadura militar, inspirador de Manuel Mandeb, el célebre personaje creado por Dolina en Crónicas del Angel Gris. Diqui, aparte, contaba con una bendición extra: en 1989 había hecho un bolo en Cipayos (la tercera invasión), una película de Jorge Coscia.
La cadena humana comenzó su paso redoblado. Grosman llamó a Fernando Molle, de Ozono Producciones, manager de Fuerza Bruta. “Queremos que creen algo como lo que ustedes saben hacer para el 25 de mayo.” Los de Fuerza Bruta no lo podían creer. “¿Nos piden narrar hechos históricos a nosotros, que hacemos justamente teatro no tradicional?”, se dijeron en la intimidad.
James fue a la primera reunión, que se hizo en octubre pasado en el Malba, ya con una idea en pañales. “No podemos hacer una instalación fija –les dijo el artista–; mucha gente no alcanzaría a verlo.” Tenía la visión de que el público alcanzaría escala ciudadana. Excedería lo previsto, habría un mar de gente. Así fue.
En esa misma reunión, James sugirió hacer un espectáculo móvil, apeló a la imagen de los carromatos carnavaleros, el pueblo en andas. “En aquella primera reunión, Diqui pensó que tendría que cubrir la atención de unos burócratas y se encontró con dos cineastas y un gran hacedor de la política entusiasmadísimos. Entonces invertimos la lógica: nosotros nos pusimos al servicio de su idea”, recuerda Coscia.
A la semana siguiente, James traía bocetos y dibujos a un bar de la calle Crisólogo Larralde, en Núñez. Aprobaron la idea de un desfile histórico. Sumaron a Felipe Pigna como profesor y guía de los artistas. “Teníamos que aprender de historia argentina de nuevo, volver a ser alumnos”, recuerda Fabito D'Aquila, el coordinador general del desfile, por Fuerza Bruta. Eligieron más de 50 estampas, antes de quedarse con las 19 finales. Estaban La Creación de la Bandera y hasta La Campaña del Desierto (leída según los indígenas masacrados). Llegaron finalmente a 21: las dos que quedaron afuera en el repechaje último fueron El Fútbol y La Vuelta de Rocha, el lugar que actualmente es el barrio de La Boca y donde se piensa que Pedro de Mendoza fundó la ciudad.
La Presidenta quería que el Desfile se inspirara en la máxima de Oesterheld: “el verdadero héroe siempre es el héroe en grupo”. Además de El Cruce de los Andes, Cristina bregó porque se eligieran el Exodo Jujeño (la retirada masiva hacia Tucumán comandada por Manuel Belgrano, como emboscada del ejército realista) y La Vuelta de Obligado, en que las tropas de la Confederación Argentina de Juan Manuel de Rosas repelieron el ataque de una escudara anglo-francesa en 1845, con el pretexto de terciar en el conflicto con Montevideo. “Cristina es la responsable absoluta de habernos inducido a elegir ese hito. Sin la Batalla de Vuelta de Obligado, Argentina podría haber sido una Centroamérica del Sur, se hubiese producido una balcanización que hubiese dado lugar a una serie de republiquetas en el Litoral”, refiere el secretario de Cultura.
Fuerza Bruta hizo el casting donde las Fuerzas Armadas del pasado ejercieron su saña bruta: los predios del Museo de la Memoria, la ex Esma. Parrilli estuvo hasta en el casting de los bailarines de tango. En marzo, James fue a una reunión con la Presidenta y el grupo de la Unidad Ejecutora del Bicentenario a la Casa de Olivos. Cristina Fernández le exigió a James que el espectáculo debía tener una calidad exhuberante, “porque va a trascender las fronteras”. Después, hubo al menos tres reuniones generales con Policía Federal, el Correo Argentino, el Incaa, el Instituto Nacional el Teatro, los Bomberos y otros organismos públicos para que el Desfile no tuviera ni un atisbo de improvisación. “Pretendíamos hacer un espectáculo de una calidad estética superlativa para conmocionar a la sociedad de modo que se involucrara y sintiera el Bicentenario como propio”, agrega Gustavo López, subsecretario general de Presidencia.
Diqui James, Fabio D'Aquila y otros integrantes de Fuerza Bruta recorrieron el centro una y mil veces. Primero pensaron que el Desfile iría por Avenida de Mayo y culminaría en el Obelisco, pero las condiciones ambientales no lo permitieron. Se eligió Diagonal Norte. Los funcionarios mandaron talar 72 árboles y otros tantos canteros desaparecieron; se levantó una extensión de la vereda. Para que pudieran pasar los carromatos se eliminó completamente ese descanso peatonal en triángulo que está justo en Diagonal y Carlos Pellegrini.
Para Fuerza Bruta fueron semanas de locos. “El mes de nuestra vida”, dice Fabito. El 19 de mayo, D'Aquila estaba en el DF estrenando el espectáculo que al mismo tiempo se presenta en el Centro Cultural Recoleta y lleva el nombre del grupo. El 21estrenaba en Nueva York. El 23 estaba en Buenos Aires para hacer la recorrida con el fuego de la zarza ardiente de la historia argentina, ese que primó en la estampa de la Constitución en llamas.
Los ensayos eran a las tres de la mañana, horas de desolación y libre del tránsito sofocante de la urbe nuestra de cada día. Diqui decidió que el fuego tendría cuatro momentos: frente al palco de los presidentes en Diagonal Norte, a la entrada del Obelisco, en el palco de la 9 de julio y al final del recorrido, cerca de avenida Independencia.
El 25 de mayo abrió el gran desfile con los pueblos originarios y una república celeste y blanco volando enganchada a una grúa. El barco descomunal y herzogiano de Los Inmigrantes paseaba campante por el río seco que partía desde Plaza de Mayo. Tenía a todas las comunidades: arriba, los que llegaron por mar (italianos, españoles, etc.), abajo, los que llegaron por aire y tierra: la Comunidad Andina y los taiwaneses en representación de las olas inmigratorias del siglo XX.
En el cuadro de El Cruce de Los Andes, además de los Granaderos, había soldados negros vestidos de campesinos, como verdaderamente sucedió. Para la estampa estremecedora de Madres de Plaza de Mayo, James eligió resaltar dos características. Trabajar el desgarro del llanto a través de una lluvia continua, e iluminar los pañuelos icónicos. Para eso se hicieron casquitos de acrílico con lamparitas Led, que son las que en general tienen las linternas, que no calientan y son de bajo consumo. El silencio noble corrió por cuenta de los dos millones que vieron el Desfile.
En 1993, los alumnos del CBC de Ciudad Universitaria se limaban las neuronas para entender La Razón Científica, el libro de la cátedra Guiber de Pensamiento Científico. Entre sus páginas, había un texto de la filósofa argentina Nelly Schnaith, que proponía esta hipótesis: las sociedades progresan científica y tecnológicamente cuando las instituciones del Estado pueden amalgamar esas ideas como mascarón de proa de sus políticas. Mutatis mutandis, para entender el fenómeno emocional de masas que provocó el Desfile del Bicentenario, habrá que decir que el arte tomó los andamiajes de la política y la desbordó con un sentido nuevo.
El secretario de Cultura de Nación y el presidente del Sistema Nacional de Medios Públicos son cineastas. Fuerza Bruta, además de tener un nombre políticamente incorrecto, es una grupo de arte que cree descaradamente que “no existe en la obra el concepto de significado y representación” y que ataca el meollo de la emoción sin pruritos intelectuales. Por último hay que saber que el jefe de producción de los festejos del Bicentenario, Javier Grosman, hace poco más de veinte años, justo cuando despuntaba el menemismo y su república bananera, fundó el Babilonia, un club de cultura, una torre eléctrica de teatro, under e invención, en un depósito de bananas del Abasto.
Estos hombres, junto a Parrilli (gestor todo terreno del kirchnerismo), los equipos técnicos y los dos mil artistas del Desfile del Bicentenario, inspiraron quizá uno de los acontecimientos más formidables y emocionantes de la vida pública, masiva y callejera de los últimos 30 años de historia argentina, al menos. El Estado se apropió de la cultura que antes recorría los bordes institucionales y hoy es el centro de la creación de la memoria colectiva.
Hay olor a cambio de paradigma. Como una revuelta contra el miedo y la crispación que infunden de manera militante algunos medios masivos.
Los Festejos del Bicentenario hicieron salir del closet al país que sí miramos.

El triunfo de la patria mestiza

Eduardo Rinesi, María Pía López, Ezequiel Adamovsky y Analía Del Franco analizan el contenido latinoamericanista de la fiesta por los 200 años de la revolución de mayo




La carroza con la que empezó el desfile del Bicentenario donde estaban representados los pueblos originarios; la migración de los países limítrofes ilustrada con las cholas que bailaban; la inauguración en la Casa Rosada del Salón de los Patriotas Latinoamericanos con retratos de José de San Martín, Lázaro Cárdenas, Juan Perón y Francisco Morazán, entre otros; un grupo de actores que desfilaron con pancartas anarquistas, peronistas, radicales y comunistas; la presencia de seis presidentes sudamericanos en los eventos oficiales. Estos fueron los rasgos más importantes de los festejos del Bicentenario según los intelectuales que hablaron con Miradas al Sur. Se trató, según ellos, de la coronación de una lectura distinta sobre lo que constituye lo argentino que contrastó con el relato de un país blanco y europeo.

El politólogo Eduardo Rinesi, director del Instituto de Desarrollo Humano, sostuvo que la celebración instaló que los 200 años de la Revolución de Mayo no pueden pensarse por fuera de la historia de la región. “Esto fue trascendente. Antes era una mirada que sólo tenía un sector del progresismo y una parte de la academia. La recuperación de la identidad latinoamericana de la Argentina es una victoria cultural”, destacó Rinesi. Los contenidos latinoamericanistas de la celebración no fueron cuestionados por ningún dirigente de la oposición política, lo que confirma la idea de Rinesi sobre el nivel de consenso que tuvieron. En cuanto al modo en que lo recibió la población, el politólogo señaló: “No sabíamos que figuras como Slavador Allende o Augusto Sandino podían conmover a millones de argentinos. No digo que la identificación del público fue inmediata. Algunos se sintieron siempre más cerca de estas figuras que otros. Pero la tranquilidad de los festejos fue una muestra de la aceptación al relato que se planteó sobre la historia argentina”. Según Rinesi, el Gobierno logró plasmar la idea de que estos personajes son parte de un drama histórico que está viviendo uno de sus capítulos en el presente. “El discurso kirchnerista tiene elementos del peronismo clásico, de la JP de los ’70, del democratismo alfonsinista, de reivindicación de los pueblos originarios”, dijo. “Todo eso encontró un espacio de en el relato del festejo y una aceptación de la ciudadanía”, remató el politólogo.

En el desfile se representaron los movimientos sociales y políticos que tuvieron peso en la historia argentina. Pasaron actores sosteniendo pancartas con consignas anarquistas, peronistas, radicales y comunistas. La socióloga María Pía López señaló que esta parte de la celebración fue un reconocimiento a las expresiones políticas que protagonizaron las luchas emancipatorias en otras etapas de la historia. Ezequiel Adamovsky, autor del libro Una historia de la clase media, dijo que los relatos de lo argentino no habían incluido al movimiento feminista que sí estuvo representado en la fiesta del Bicentenario. Por otra parte, el escritor planteó que le parece discutible que el Gobierno forme parte de la misma corriente histórica a la que pertenecieron estos movimientos. “No sé si siempre el kirchnerismo está a la altura del relato que propone”, dijo Adamovsky. Pía López no coincidió con esta afirmación: “Procesos como los que encabezaron Yrigoyen o Perón fueron de una gran democratización de la vida social en comparación con el momento en el que habían llegado al gobierno. Durante el proceso actual pasaron cosas parecidas. Se ampliaron derechos, como la creación de la Asignación Universal por Hijo, las jubilaciones que se dieron a las amas de casa, aumentos salariales o del presupuesto educativo. Se agrega, con este Gobierno, un modo no represivo de abordar la protesta social”, dijo. La socióloga añadió que otro de los motivos que permiten comparar la etapa actual con otros movimientos emancipadores es que se puso en el centro del debate político la cuestión de la igualdad.

¿Hay crispación? A partir del conflicto por la Resolución 125, la palabra crispación se volvió la más usada por la oposición mediática, intelectual y política, que pregona el fundamentalismo anti K. El buen clima de convivencia que transitaron los 6 millones de personas que participaron de los festejos puso en duda hasta qué punto esa palabra describe el clima social. “Es cierto que durante la pelea por las retenciones hubo un ambiente convulsionado. Pero hoy cambió mucho. Sin embargo los medios describen la situación como si todo siguiera igual”, dijo Pía López. Rinesi sostuvo que el discurso mediático se chocó con la realidad en los festejos porque suele atribuirle al oficialismo la crispación y el Gobierno se manejó con una enorme prudencia durante el Bicentenario. “Se mantuvo inteligentemente a un costado. No intentó atribuirse el nivel de convocatoria. La Presidenta fue cuidadosa en sus discursos, con una clara posición de no subrayar diferencias políticas y generar un ambiente de conmemoración universal”, señaló Rinesi. Pía López compartió la visión sobre la mesura con que se manejó el Ejecutivo y agregó que durante los festejos los dirigentes opositores quedaron en una situación muy opaca.
Hubo otro hecho que Rinesi subrayó. Fue el miércoles pasado cuando los diputados Ricardo Alfonsín, Agustín Rossi, Elisa Carrió, Silvia Vázquez y Felipe Solá cruzaron la avenida Callao y se pararon frente al busto que recuerda a Mariano Moreno en la Plaza de los Dos Congresos. Le rendireron homenaje dejando una ofrenda floral. “Hasta Clarín tuvo que remarcar el buen clima entre los dirigentes durante esa conmemoración”, destacó Rinesi.
El ánimo que se vio en la calle, según la socióloga Analía Del Franco, directora de Analogías, tuvo que ver con las expectativas de la población sobre al futuro. “A mí, como a todo el mundo, me sorprendió el nivel de masividad de la convocatoria. Sin embargo me parecería difícil que tanta gente salga a festejar en una situación social de pesimismo o de bronca”, dijo Del Franco. Luego agregó que en las últimas encuestas que realizó con la pregunta: cómo imagina su futuro personal, el 75 por ciento de la consultados contestó que igual de bien o mejor. “Esa es una señal de optimismo”, resaltó la analista.
La necesidad de celebrar la pertenencia nacional, según Adamovsky, tuvo mucho que ver con la masividad del Bicentenario. “A partir de la crisis de 2001 reapareció un fuerte deseo de comunidad nacional ante el trauma de la crisis”, señaló. El escritor sostuvo que esa necesidad fue una reacción a la violencia con que la Argentina vivió su supuesto ingreso al mundo de la globalización.

El arte y las masas. Los intelectuales que hablaron con este medio consideraron que la calidad artística del espectáculo de Fuerza Bruta fue otro de los elementos que pusieron en discusión una idea instalada. Dijeron que se demostró que no es tan cierto que la única oferta cultural que puede ser masiva es un concurso de televisión. “Cabe preguntarse si la población consume esos shows porque es lo que más le gusta o porque es lo único que le ofrecen”, señaló Rinesi. Después agregó que el espectáculo del Bicentenario tuvo un lenguaje de arte audiovisual muy sofisticado. “Millones de personas lo disfrutaron. No me refiero sólo a las que estuvieron en la calle sino también a las que lo vieron por televisión. Indica que lo masivo no necesariamente tiene que ser Tinelli, es muy alentador”. El politólogo señaló que este dato es en sí mismo un hecho político.
Adamovsky acordó con la posibilidad de que propuestas de mejor calidad artística pueden ser multitudinarias. Sobre el discurso que sostiene que lo único masivo puede ser una oferta como Bailando por un sueño dijo: “El argumento de los que hacen televisión y defienden programas basura diciendo que es lo que la gente quiere ver es simplemente una autojustificación”.
Ahora, sobre el final de la nota, el cronista dejará de lado los análisis sobre el Bicentenario y se permitirá un pequeño desliz emotivo: Feliz cumpleaños, patria mía.

El monopolio del miedo

Las maniobras del grupo Clarín para atemorizar y presionar a sus empleados en su estrategia contra la aplicación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual



La estrategia del Grupo Clarín para impedir la plena aplicación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual tiene varios frentes. Algunos son claramente visibles, como la utilización –a cambio de presencia mediática y otros favores– de los servicios de variopintos dirigentes políticos de la oposición que repiten en sus declaraciones el discurso elaborado por los estrategas del monopolio, la proliferación de recursos y chicanas judiciales en varias provincias a la vez, el mensaje unificado en todos los medios del Grupo y el lobby fogoneado a través de la Asociación Empresaria Argentina.
Menos visible, en cambio, es el trabajo que sus directivos realizan hacia adentro del Grupo para impedir –mediante el temor y la instalación de una fuerte sensación de inseguridad laboral– la disidencia de sus propios empleados. En estos días, los periodistas del diario Clarín fueron invitados por la dirección a participar de una encuesta interna en la que se los interroga sobre sus opiniones políticas y sus posiciones frente a determinados temas candentes de la realidad nacional (ver en esta pág.). Asimismo, Miradas al Sur accedió a una grabación donde dos importantes directivos de Canal 13 bajan línea al personal de la emisora sobre las consecuencias que la vigencia de la ley podría tener sobre sus fuentes de trabajo.

Puertas adentro. En septiembre del año pasado, ante la inminencia de la discusión de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, los popes del canal llamaron a todo el personal a una reunión en el estudio A. Según cuentan testigos, allí estaba “todo el canal”. Incrédulos, los empleados de Artear veían cómo incluso sus compañeros que estaban de vacaciones fueron convocados a la charla que tuvo sólo dos oradores: Daniel Zanardi, gerente general de la empresa, y Carlos D´Elía, gerente de noticias. A alguno de los presentes le pareció importante grabar lo que allí se decía. Aquí van algunos pasajes:
Zanardi: –Todos nos preguntamos cuánto puede impactar esto (la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual) y la respuesta es: mucho. Si tenemos en cuenta que esta ley tiene como objetivo fragmentar los medios y esa fragmentación no hace más que intentar desguazar nuestra compañía. Las alternativas que hoy se estarían viendo referidas a los negocios pasarían con Cablevisión, y dejar Artear, o en caso de que el Grupo decida por Artear, una señal abierta que es Canal 13 y una sola señal de cable que podría ser o Todo Noticias o Canal 13 Satelital. Este es, a grandes rasgos, el gran impacto que tiene este proyecto en Artear. Obviamente, se están estudiando las estrategias adecuadas para cada una de las instancias que van a venir a futuro. La batalla es larga, recién comienza, falta mucho y nos asiste el derecho en muchos de los aspectos que vamos a discutir. Cuando se trata de interrumpir el orden constitucional y las garantías, todo está en riesgo y esa es la situación con la que nos estamos encontrando en este momento. Hemos recibido ataques; seguramente seguiremos recibiéndolos. A nuestras empresas, a nuestra gente y vamos a tener que estar preparados para vivir por lo menos dos años muy complicados. Las estrategias legales y jurídicas se van a llevar a cabo. No es el momento de comunicarlas porque se están evaluando. Lo que sí les quiero decir es que a medida que ocurran hechos trascendentes, se los vamos a comunicar. En cuanto a la línea editorial a seguir por Artear, Carlos D´Elía se va a referir brevemente en estos momentos a eso.
D´Elía: –Yo quiero decirles que nuestro objetivo es tener la templanza que necesita este momento y seguir haciendo lo que venimos haciendo hasta hoy. Yo creo que nuestro objetivo principal es no entrar en provocaciones, no responder a provocaciones y no ponernos en el medio de una batalla que no nos pertenece, y que ni generamos ni inventamos nosotros. En TN y en Canal 13 hace 20 años que hacemos lo mismo. Ahora parece que hay gente a la que no le gusta. Quiero aprovechar que Daniel me da este momento para decirles que lo de la pluralidad es una mentira. Pluralidad es menos. Si pluralidad es que no esté TN, que no esté América 24, si significa eso, pluralidad es menos. También nos han dicho de los pueblos originarios, los mapuches, los tobas… todos estamos de acuerdo. Pero, ¿quién le va a pagar el canal o la radio a los mapuches y los tobas? ¿Quién va a comprar si llega el punto que se venda Canal 13, TN, Telefé, Canal 9, Canal 26, América… los mapuches, los tobas? No, los van a comprar todos los amigos del Gobierno. Pero nosotros sabemos eso y sabemos que hay cosas que no podemos decir porque es tomar un partido por una guerra que –como dije– no nos pertenece. Lo único que podemos hacer es seguir trabajando con las herramientas que nos dan el profesionalismo y la experiencia. Eso es lo que les pido a todos: templanza, paciencia y profesionalismo.
Zanardi: –Para finalizar, todos nosotros y todas nuestras familias están viviendo un momento de mucha zozobra, obviamente estamos al tanto y entendemos la situación que puede estar viviendo cada uno de ustedes. El momento es difícil pero los invito a que nos concentremos en nuestras tareas. El Grupo y Artear van a hacer todo el esfuerzo posible para mantener los derechos y los activos de nuestras compañías, y la fuente de trabajo de cada uno de ustedes. Nada más y muchas gracias.
Luego de la reunión, los empleados continuaron con sus tareas, algunos asustados y otros –una parte importante– con una importante sensación de hastío. En realidad, las fuentes de trabajo a las que aludía Zanardi ya habían sido vulneradas menos de nueve meses antes cuando casi una veintena de trabajadores de la empresa fueron despedidos, dos de ellos por presentarse a elecciones como delegados de prensa. “El Grupo habla de la pluralidad que se pierde con la ley, cuando es una de las empresas de televisión que más voces ha acallado y más gente en la calle ha dejado. Los contenidos que producen los colegas de Buenos Aires, se difunden en todos los canales del interior que le pertenecen, y abortan la producción local”, dijo a Miradas al Sur Marcelo Moreira, uno de los despedidos por postularse como delegado en diciembre de 2008.
Un empleado presente en la reunión recordó también el paso de Marcelo Molina, productor general de TN, por el noticiero de Canal 12 de Córdoba, poco después de que el Grupo comprara esa señal. Hubo escraches y protestas gremiales por el despido de varios periodistas que, se suponía, no iban a transformarse en voceros de la línea periodística que pretendía imprimirle el Grupo a su nueva emisora. No es la única mancha que el lomo corporativo tiene en esa provincia. En abril de 2008, La Voz del Interior eliminó de sus páginas un artículo del prestigioso columnista Enrique Lacolla porque fustigaba el lock out patronal del campo. Cuando éste denunció la censura, la dirección del diario –propiedad de Clarín– decidió prescindir de sus servicios. Ninguna de estas acciones, denunciadas por los gremios de prensa, tuvo eco en los medios del establishment provincial y menos aún en Buenos Aires.

La cabeza de Goliat. La línea informativa que TN baja para toda la red viene directamente de las oficinas corporativas del Grupo. Las reuniones se realizan todos los lunes, pero desde que el monopolio decidió declararle la guerra al Gobierno estos encuentros se hicieron más frecuentes. Allí, Jorge Rendo, Hernán Verdaguer, Martín Etchevers, Ricardo Kirschbaum, los gerentes de TN y algunos periodistas de peso, como Bonelli y Van der Kooy, definen la línea editorial.
Para entender hasta dónde llega el poder de decisión del área de Relaciones Corporativas basta una anécdota ocurrida en Canal 13 los días previos a las últimas elecciones legislativas. Cuando Marcelo Tinelli produjo el bloque de imitaciones de políticos Gran Cuñado, invitaron al ex presidente Néstor Kirchner a participar del programa junto a su doble. Kirchner no aceptó pero, en cambio, le propuso a Tinelli grabar en Olivos. El conductor aceptó pero, cuando consultó con el comité conducido por Rendo, le bajaron el pulgar. Y Tinelli no fue a Olivos.
Por debajo de este comité editorial, TN es la gran usina de la línea informativa unificada para toda la red televisiva del Grupo, tanto en lo que hace a Canal 13 como a los canales de cable locales diseminados por el interior. Por eso en los noticieros del 13 hay contenidos que se replican con columnistas de otros ámbitos del Grupo. Gustavo Silvestre y Marcelo Bonelli han sido columnistas en muchas oportunidades de Telenoche, pero desde hace un tiempo también fue convocado el editor de Clarín, Eduardo Van der Kooy. El objetivo de esta movida fue trasladar el prestigio de esos periodistas al canal masivo. Porque en el edificio de Lima 1261 entienden que hay ciertos temas que se pueden instalar en el programa de Marcelo Tinelli y otros que no.
A su vez, los noticieros del 13 y de TN se repiten en todos los cables del interior, propios o de otros. En algunos casos, las señales locales tienen una pequeña producción propia pero la editorial está marcada por TN.
Desde el 13 lo explican con lógica brutal. “Para apretar a un intendente, usar TN es como tirarle un misil a un mosquito. En cambio, si tenés un canal local y el intendente exige cuidado con el cableado público, vos podés presionarlo con eso.” La ecuación parece perfecta para la corporación. Lo que hacen las emisoras locales es consolidar con contenidos el negocio de la distribución del cable. La mayoría de los canales locales ya existía y Artear los fue comprando para generar una estructura de noticias de cercanía, que reflejen los intereses del Grupo en la zona. Todo esto con los estándares artísticos de TN (misma tipografía en los videographs, decorados similares, puesta de cámaras idénticas).
Para tener más eficacia en su bajada de línea, el Grupo también controla la producción de todos los contenidos locales y decide cuáles se difunden y cuáles no. “Si tenés la grilla ocupada con contenidos tuyos, tenés una excusa para no subir contenidos de otros”, explican quienes saben que la repetida excusa de que no hay espacio en la grilla esconde en realidad directivas expresas de Jorge Rendo o de sus colaboradores más cercanos.

La causa Noble, a un paso de la verdad

Los hechos se precipitaron. Marcela y Felipe negaron su conformidad para realizarse las
pericias de ADN en el Banco Nacional de Datos Genéticos. La jueza sandra arroyo salgado
ordenó tomar nuevas muestras. El lunes próximo comenzaría el trabajo de los peritos



La historia comenzó a cerrarse. El primer capítulo arrancó cuando Ernestina Herrera de Noble, poco después del golpe del ’76, se presentó con un bebe en sus brazos ante la fallecida jueza Ofelia Hejt, entonces titular del Juzgado de Menores Nº 1 de San Isidro. Corría el 13 de mayo y la viuda de Noble urdió una historia. Apuntalada por la complicidad de la jueza y dos testigos que resultarían falsos, manifestó haber encontrado una criatura en el interior de una caja abandonada en la puerta de su residencia. El segundo acto se concretó semanas más tarde, el 7 de julio, cuando Hejt le entregó en guarda una niña abandonada por una madre que, como se comprobaría después, nunca existió.

A las 10.43 del viernes pasado, un hombre trajeado de gris topo abrió la puerta trasera de la camioneta Volkswagen Tiguan que traía a los hijos adoptivos de la dueña del Grupo Clarín. Con rictus severo y anteojos ahumados, Marcela y Felipe bajaron escoltados por más hombres grises. En silencio atravesaron los flashes de los fotógrafos y el remolino de noteros que los esperaba en la puerta del Juzgado Federal Nº 1 de San Isidro.
En el interior del edificio los aguardaba la jueza Sandra Arroyo Salgado. Los había citado a una audiencia para presentarse formalmente, pero también, y sobre todo, para marcar la cancha. Como excepción, permitió la presencia de sus abogados, Alejandro Carrió y Roxana Piña. Cumplidas las formalidades del caso, los informó de sus derechos como presuntas víctimas a conocer la causa y asistir a determinadas audiencias.
El clima era tenso. Arroyo Salgado fue al grano. Con firmeza les advirtió que la investigación continuaría, aun contra su voluntad, porque “no eran las únicas potenciales víctimas”. Había personas –les explicó la jueza– que podían compartir su sangre y que los buscaban sin respiro desde hacía mucho tiempo. Agregó, además, que los entrecruzamientos debían hacerse en el Banco Nacional de Datos Genéticos (Bndg), donde contaban con las debidas “garantías de control y contraprueba”.
En el epílogo de la cita, la magistrada les pidió sus consentimientos para extraer nuevas muestras o utilizar en las pruebas de histocompatibilidad las muestras de sangre, saliva y objetos personales que habían sido tomadas los días 29 y 30 de diciembre pasados. La respuesta no se hizo esperar. Ante ambas posibilidades, “los jóvenes se negaron rotundamente” fundamentando “que tienen derechos”, según relató la fiscal federal Rita Molina al término de las dos horas y cuarto que duró la audiencia.

Los allanamientos. Pasado el mediodía, los jóvenes abandonaron el juzgado como habían llegado: en un férreo silencio. La negativa a periciar las muestras en el Bndg –como determinó la Sala II de la Cámara Federal de San Martin y confirmó la Sala II de la Cámara de Casación Penal– terminó por decidir a la jueza. Sin más demoras, ordenó siete allanamientos con el objetivo de recolectar nuevos rastros que permitan obtener nuevas muestras. Esta vez, uno de los procedimientos se concretó en la propia casa de la dueña del multimedios.
Al promediar la tarde, según confió a Miradas al Sur una fuente ligada a la investigación, los secretarios del juzgado, acompañados por efectivos de la Policía Federal, llegaron al domicilio de Herrera de Noble. Orden judicial en mano, se llevaron prendas y objetos personales de Marcela y Felipe para extraer de los rastros biológicos contenidos en los objetos los registros de ADN que permitan avanzar con las pruebas periciales.
Por esas horas, la respuesta del Grupo Clarín y sus aliados no se hizo esperar. El silencio que durante años mantuvieron sobre el tema se transformó en denuncia. “Violenta”, “vejatoria” e “innecesaria” fueron las palabras que utilizaron los penalistas Carrió y Piña en su intento por viciar de nulidad la orden judicial. La portada online del matutino sostenía: “Nuevo y abusivo allanamiento en las casas de los hermanos Noble Herrera”.

La última de Bergesio. Quienes conocen el expediente subrayan que la decisión de Arroyo Salgado tiene bases sólidas. Explican que los rastros tomados durante los allanamientos que concretó el juez Conrado Bergesio por orden de la Cámara Federal de San Martín –antes de ser apartado de la causa– se podrían haber deteriorado con el paso del tiempo. En los hechos, se trató de la última intervención del ex integrante del “Camarón” que engendró el dictador Alejandro Agustín Lanusse.
Sin embargo, no fue su última tropelía. Removido de la causa el 28 de abril pasado por los camaristas Daniel Rudi, Alfredo Mansur y Horacio Crack “para asegurar la plena vigencia del derecho en condiciones de igualdad”, Bergesio “olvidó” enviarle a la nueva jueza –junto con el expediente– un tercer juego de muestras que guardaba en la caja fuerte de una de las secretarías de su juzgado. Los otros dos juegos estaban, desde el 15 de marzo pasado, en el Bndg.
La información, confirmada por Abuelas de Plaza de Mayo y fuentes judiciales, señala que Arroyo Salgado advirtió la ausencia del tercer juego el 12 de mayo, pero sólo después de leer los 45 cuerpos que acumula el expediente. Ese mismo día, Bergesio –removido ya por los camaristas– le asignó las llaves de la caja fuerte a Fernando Goldaracena, un secretario de su máxima confianza.
Cuando la jueza ordenó el traslado del material al Laboratorio de Análisis Clínicos del Cuerpo Médico Forense –el mismo día en que advirtió la irregularidad–, la caja fuerte había sido violada. Goldaracena, obturando cualquier investigación, dijo que se le había roto. El joven secretario es hijo de su homónimo, defensor del dictador Armando Lambruschini durante el Juicio a las Juntas Militares, y de otros marinos acusados por crímenes de lesa humanidad, como el capitán de navío (R) Jorge Enrique Perrén y el vicealmirante Antonio Vañek.

Lo que vendrá. “No consiento que mi material genético sea utilizado para ningún tipo de análisis de histocompatibilidad”, fue la escueta respuesta de Marcela ante las propuestas de Arroyo Salgado. “Tampoco consentimos a la utilización de nuestra sangre, ni siquiera para que se haga la comparación con las dos familias querellantes, García Gualdero y Lanoscou-Miranda”, agregó Felipe. Una vez más, el cerco ideológico les impedía responsabilizar a quienes los arrancaron de sus verdaderos padres.
Con los rastros obtenidos durante los allanamientos efectuados el viernes pasado, Arroyo Salgado ordenará el lunes próximo iniciar las pericias en el Bndg, según lo establece la ley. La medida, además de acceder a lo requerido por Abuelas de Plaza de Mayo, tiene el consentimiento de la fiscal Molina, quien ya dictaminó que el entrecruzamiento debe hacerse con todas las muestras aportadas por los familiares de los desaparecidos durante la última dictadura.
En San Isidro desestiman las veladas acusaciones de los abogados Carrió y Piña. Además, lejos de la sorpresa, recuerdan que la jueza actuó de la misma forma en que lo hizo en los dos causas de hijos de desaparecidos en las que le tocó intervenir. Primero buscó que las pericias se hicieran con la conformidad de las víctimas. Se trata de los casos de Francisco Madariaga Quintela –resuelto en febrero pasado– y de la hija de Beatriz Pérez Recchia –dilucidado a principios de 2009–.

Saturada por las zancadillas procesales que ante cada avance de la causa tendieron hasta aquí los abogados de Herrera de Noble, cuesta no perder de vista la esencia de la investigación que comenzó a cerrarse. En pocas palabras: la presunción de que Marcela y Felipe fueron fraudulentamente adoptados tras ser arrebatados a sus padres biológicos en el marco de un plan sistemático que secuestró, torturó y asesinó en las cárceles clandestinas de la dictadura. Hoy, a treinta y cuatro años de los hechos que originaron el expediente, la Justicia promete esclarecer las verdaderas identidades de los hijos adoptivos de la dueña “del gran diario argentino”.

Comunicado de Prensa sobre la despedida a Teo Peralta




Junín


Hugo Yasky y Edgardo Depetri despidieron
a Teo Peralta, importante dirigente de ATE




En las primeras horas de la tarde de hoy el Subsecretario de Relaciones con la Sociedad Civil de la Presidencia de la Nación, Edgardo Depetri, y el Secretario General de la CTA, Hugo Yasky, despidieron en el cementerio privado de Junín a Teodoro Peralta, uno de los dirigentes más importantes de ATE, quien falleciera ayer a los 60 años.
En el homenaje de despedida, Edgardo Depetri recordó la historia de militancia junto a Teo –como todos lo conocían- y la lucha contra la política privatizadora de los 90. “Hemos visto a TEO defendiendo a los trabajadores en las minas de Capillita, en Andalgalá, Catamarca; en el yacimiento de Río Turbio, en los Astilleros de Río Santiago, en las fábricas militares y en la defensa de la CNEA (Comisión Nacional de Energía Atómica), donde trabajó hasta su muerte”.
El Ministro de Planificación, Julio de Vido, saludó a la familia y Depetri les llevó un mensaje afectuoso de Cristina y Néstor Kirchner.
Ante familiares, amigos y dirigentes de la CTA y de ATE de la región, Depetri dijo emocionado que “Teo nos seguirá acompañando con su carisma, su compromiso y su ejemplo de militancia y su nombre se convertirá en un símbolo de nuestras luchas por un país mejor. Desde ahora su imagen estará impresa en nuestras banderas, presente en nuestras asambleas, y se convertirá en guía de todos los militantes del campo popular”.

Una fiesta con el pueblo en la calle



Flanqueada por José Mujica, Fernando Lugo, Evo Morales, Sebastián Piñera, Lula da Silva, Hugo Chávez y Rafael Correa, Cristina Fernández de Kirchner agradeció “la alegría” de la gente y resaltó que “estamos mejor que hace cien años”.

“Queríamos un Bicentenario diferente. Un Bicentenario popular con el pueblo en las calles. Hace apenas veintisiete años que tenemos una democracia continuada. Agradezco el patriotismo, la alegría con que millones han salido a las calles a festejar, a reír, a compartir”, dijo la presidenta Cristina Fernández de Kirchner al inaugurar la Galería de los Patriotas Latinoamericanos acompañada por sus pares de Uruguay, Brasil, Paraguay, Bolivia, Chile, Venezuela y Ecuador. Los retratos de Ernesto “Che” Guevara, Juan Domingo Perón, Evita, Salvador Allende, Hipólito Yrigoyen y José Martí, entronizados en la Casa Rosada, reflejaban que otra historia se está escribiendo. En las calles, millones –literalmente– participaban en una procesión pagana para conmemorar los doscientos años de la Revolución de Mayo. Lejos habían quedado en el recuerdo de un día inolvidable los dos Tedéum cuando entrada la noche los presidentes disfrutaban del magnífico “Desfile de los 200 años” antes de asistir a la cena en la Rosada.

Flanqueada por un óleo de Perón, con sus brazos en alto, la imagen del día que dijo: “Me llevo en mis oídos la más maravillosa música que es la voz del pueblo argentino” y la foto de Allende en su recorrida de asunción, la Presidenta recordó que ayer se cumplieron también siete años de la asunción del kirchnerismo. Destacó que “nuestros pueblos están mejor que hace cien años. El Centenario se festejó bajo estado de sitio, no existían los derechos sociales, era delito la actividad sindical, no se podía elegir libremente a nuestros gobernantes”. En un mensaje a la oposición, remarcó que “pudimos cumplir estos doscientos años con la más absoluta democracia de la que se tenga memoria” y advirtió: “seguramente nos equivocaremos, cometeremos errores, también tendremos aciertos, pero todos saben, aun los que no están de acuerdo con nosotros, que no tomaríamos ninguna decisión en contra de los intereses del pueblo”.


De a poquito

La Casa Rosada estaba de fiesta. Todos los detalles habían sido cuidados hasta la perfección. La prensa sólo podía observar desde un balcón del primer piso cómo se iba llenando la Galería de los Patriotas. En la sala principal, ciento cincuenta y seis invitados compartirían la cercanía con los presidentes Evo Morales (Bolivia), Hugo Chávez (Venezuela), José “Pepe” Mujica (Uruguay), Rafael Correa (Ecuador), Fernando Lugo (Paraguay) Sebastián Piñera (Chile), Lula da Silva (Brasil), y con los ex presidentes Martín Torrijos (Panamá) y Manuel “Mel” Zelaya, destituido por un golpe cívico-militar el 28 de junio del año pasado.

El diputado socialista Jorge Rivas, en silla de ruedas desde que en un asalto violento lo golpearon en la cabeza, fue uno de los primeros en llegar. Martín Sabbatella, ex intendente de Morón y también diputado, estuvo también entre los tempraneros. El filósofo Ricardo Forster y el gobernador de Mendoza Celso Jaque integraron la avanzada. Los ministros del Ejecutivo llegaron casi todos en hilera. Los diputados radicales Juan Carlos Marino y Ricardo Alfonsín fueron ubicados en la primera fila junto al presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti, quien se apresuró a mirar el cartelito para ver a quién le sentarían del otro lado: le tocó el presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Fellner.

Mientras la Presidenta y el canciller Jorge Taiana se apostaban al final de la alfombra roja para recibir a los mandatarios extranjeros, los corrillos dejaban entrever afinidades e indiferencias. Los ministros Aníbal Fernández, Carlos Tomada, Amado Boudou y Julio Alak departían en un minigabinete. Mientras la ministra Nilda Garré se abría paso para ir a saludar a Rivas. Los gobernadores de Buenos Aires, Daniel Scioli y de Santa Fe, Hermes Binner, sentados codo a codo no encontraron tema de conversación. Sólo la irrupción para saludarlos de la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, les permitió intercambiar algunas palabras.

El diputado Dante Gullo entró al grito de “¡Alfonsín/Alfonsín!” para saludar a su colega, ocurrencia que no pareció causarle mucha gracia al destinatario. Hebe de Bonafini llegó acompañada por un grupo de Madres una vez que estaban casi todos ubicados. Habían quedado en un segundo salón

junto a Madres-línea Fundadora que también pasaron a la galería principal. Un sacerdote solitario se sentó detrás de los gobernadores. Sólo se acercó a saludarlo la diputada María Laura Leguizamón que pasó luego a otro salón. El embajador en Chile, Ginés González García provocó los gritos del cronista de CQC que intentaba, infructuso, de hacer oír sus ocurrencias desde las alturas. Zelaya y el secretario general de la OEA, Miguel Inzulza, también escucharon los alaridos y levantaron la cabeza: el camarógrafo, por lo menos, había logrado su objetivo.


Entrada triunfal

Ya se habían apoltronado los jefes de las Fuerzas Armadas cuando desde las pantallas de los LCD surgieron las primeras imágenes de los presidentes visitantes. Chávez cosechó los mayores aplausos junto a Correa y Evo. Menos fervor despertaron Lugo, Piñera, Mujica y Lula.

El retrato del Che, tomado por el fotógrafo Alberto Korda, enfrentado al óleo de Evita con la cabellera al viento escoltando a Perón y Allende y acompañados por el obispo salvadoreño Arnulfo Romero, Hipólito Yrigoyen, Getúlio Vargas y Víctor Haya de la Torre, corroboraban la concepción de un Bicentenario diferente. Rostros impensados en la historiografía oficial de América latina hasta hace apenas unos años. Patriotas elegidos por los actuales presidentes latinoamericanos al recibir la invitación de la presidenta argentina.

Cristina Fernández encabezó la entrada a la Galería de los Patriotas y se detuvo a darles un beso al diputado Rivas, a Hebe de Bonafini, a Taty Almeida y a Estela de Carlotto. Detrás suyo, Chávez, Correa y Evo repitieron los abrazos con Madres y Abuelas. El ex presidente Néstor Kirchner aprovechó el tumulto del ingreso para ubicarse en la primera fila, frente a su esposa y al lado de Zelaya.

Apenas se paró frente al atril y agradeció la visita de sus colegas latinoamericanos. Desde el segundo salón de la Galería donde compartían lugares Luis D’Elía, Marta Bianchi, Luisa Busnelli, Lito Cruz, María Seoane, Francisco “Tito” Nenna, Eduardo Luis Duhalde, Horacio González, Ariel Basteiro, Claudio Morgado, Juan José Alvarez, entre muchísimos otros, llegó el grito de “Patria sí, colonia no”.

Un video protagonizado por una nena con uniforme de escuela privada presentó a los “Patriotas del Bicentenario”. Los aplausos tronaron con el Che, Farabundo Martí, Augusto César Sandino, Túpac Amaru, Solano López, y llegaron al clímax con Allende, Belgrano, San Martín, Rosas, Yrigoyen, Perón y Eva. “Todos son los padres de la Patria grande”, repitió la nena y empezó el discurso oficial.

“En el Centenario queríamos parecernos a Europa y no ser nosotros mismos. Habíamos traído a un miembro de la Casa Real de España (N. de R.: por la Infanta Isabel de Borbón). Hoy, en cambio –más allá del respeto a España–, estamos aquí con quienes han abonado América con sus ideas, su sangre, sus ideales, que prodigan la libertad para la igualdad”, precisó la Presidenta. Haciendo un paneo por los rasgos de los presidentes, Cristina Fernández remarcó: “Si uno nos mira a todos nosotros, verá diferencias de orígenes pero un solo objetivo: que sus pueblos, sus sociedades tengan más libertad, más igualdad, una distribución más equitativa de la riqueza, más educación y más salud”.

En el Cabildo estaba esperando el espectáculo de luces y sonido y un poco más allá el desfile de Fuerza Bruta. Antes del “¡Viva la Patria!, ¡Viva Argentina!, ¡Viva América latina!”, la Presidenta agradeció a sus pares el apoyo unánime por el reclamo de soberanía en las Islas Malvinas. Una placa de bronce inmortalizó la Galería de los Patriotas y todos cruzaron caminando la Plaza de Mayo para seguir la fiesta en la calle.

El Bicentenario se convertía así en un hito de otra historia.

Reapertura del Colón. Investigarán a Macri por la transmisión de TV



El jefe de gobierno porteño acaba de abrir otro frente de tormenta al otorgar en exclusividad a Canal 13 la transmisión de la función que significará la reapertura del Teatro Colón. La titular de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad, Alicia Pierini, anticipó hoy que una vez que pasen los feriados presentará una actuación de oficio para investigar por qué se tomó esa decisión.

Alicia Pierini, titular de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires, adviritó que presentará la semana próxima una actuación de oficio para investigar las razones por las cuales el gobierno porteño otorgó en exclusiva a Canal 13 la transmisión de la reapertura del Teatro Colón. El objetivo de la investigación, dijo Pierini en Radio 10, es poder determinar si hubo "un motivo plausible o si fue un error administrativo".

La funcionaria lamentó haberse enterado sobre la marcha de la decisión que tomó Mauricio Macri de otorgar los derechos de transmisión de la reapertura del teatro Colón a un solo medio privado, ya que de otro modo hubera realizado la denuncia. De todos modos, buscará que se den las explicaciones ya que la reinauguración "no es una función privada", afirmó.

Por su parte, la legisladora de Nuevo Encuentro, Gabriela Cerruti, calificó la decisión como "un desaguisado” y opinó que Macri "está buscando algún tipo de protección mediática ante su complicada situación procesal y política”.

"Es un evento que se realiza en un espacio chico, donde sólo 2 mil personas podrán disfrutarlo, y no hay ninguna posibilidad de verlo si no es por los medios”, lamentó la legisladora.

También Aníbal Ibarra -legislador porteño y ex jefe de gobierno- se mostró sorprendido por esta decisión, al señalar que "para hacer algo así, primero se debería haber efectuado una contratación pública", pero descartó que se haya hecho.

Ibarra aseguró que es algo "inédito" porque "no se trata de un evento privado ni de una fiesta particular ni de un casamiento, sino que se trata e un evento oficial que se rige por protocolo oficial".

Conflicto de poderes porteño

"No nos dejan trabajar, intentan disciplinarnos"




Los jueces Roberto Gallardo y Elena Liberatori acusaron al Gobierno de Mauricio Macri por "la intromisión" en las tareas del poder judicial durante una conferencia de prensa. La magistrada explicó en declaraciones a Radio América: "Cumplo 10 años como jueza y esto no lo viví nunca".

Los jueces Roberto Gallardo y Elena Liberatori denunciaronal Gobierno de la Ciudad por "la intromisión" en las tareas del poder judicial durante una conferencia de prensa.

En ese sentido, el juez Gallardo explicó: "Queremos informar a todos los ciudadanos de la Ciudad que no podemos trabajar, no nos dejan trabajar, intentan disciplinarnos", e invitó a la Audiencia Pública que se va a realizar mañana en el Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad.

"Somos cinco jueces de la Ciudad, de quince del Fuero Contencioso, que hemos sido demandados por la el Gobierno de la Ciudad", agregó, al tiempo que aseguró que hay "miedo y temor" entre los trabajadores del sector.

Por su parte, la jueza Liberatori advirtió en declaraciones a Radio América: "Los jueces contenciosos de la Ciudad intervenimos en una serie de amparos que tenían en común a una candidata (Dra. Daniela Ugolini) para ocupar un cargo en el Tribunal Superior de Justicia. Mi expediente era por una mala información y deficiencias en los antecedentes de la candidata".

"Los procedimientos alegan que no les dejamos ejercer a (Mauricio) Macri sus atribuciones. Nos toca con frecuencia estar en la mira. Macri dijo que yo era un desastre como jueza, pero nos toca a todos. El control es antipático pero es nuestra función", agregó la magistrada.

Además, Liberatori sostuvo: "Con todos los gobiernos hubo causas molestas. El jefe de gobierno se mostró molesto por una multa que le impuse por días de atraso en una obra sin terminar en el hospital Tobar García que lo irritó mucho. Otro por la villa Zabaleta y el barrio Rodrígo Bueno de Costanera Sur. Los expedientes que más le molestan a Macri son los referidos a los temas sociales".

"Hay un intento de disciplinamiento en la Ciudad. Cumplo 10 años como jueza y fueron muchos los funcionarios que irritamos, pero esto no lo viví nunca", concluyó.

El conflicto entre el Gobierno porteño y los jueces se desató durante el proceso de designación de la fiscal de Cámara Daniela Ugolini para integrar el Tribunal Superior de Justicia.

La medida generó no sólo varias acciones en los tribunales porteños planteando recursos de amparo por irregularidades, sino que también desencadenó en un duro enfrentamiento entre los tres poderes del Estado porteño que culminó con una causa por conflicto de poderes iniciada por el Ejecutivo y el Legislativo contra cinco jueces del Fuero Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad (entre ellos Elena Liberatori, Patricia López Vergara, Guillermo Scheibler y Roberto Gallardo).

NO TIENEN VERGUENZA !!




La UCR declara guerra a los Kirchner en apoyo a Sanz

El radicalismo se abroqueló ayer detrás de Ernesto Sanz para enfrentar al Gobierno, que cuestionó las declaraciones del presidente de la UCR sobre el reparto de fondos en la asignación universal por hijo, lanzando por primera vez un debate sobre la supuesta corrupción en la administración Kirchner.
El radicalismo se abroqueló ayer detrás de Ernesto Sanz para enfrentar al Gobierno, que cuestionó las declaraciones del presidente de la UCR sobre el reparto de fondos en la asignación universal por hijo, lanzando por primera vez un debate sobre la supuesta corrupción en la administración Kirchner. Con una inusitada lista de declaraciones oficiales de todos los sectores del partido, los radicales atacaron la "campaña de desacreditación y desprestigio de la que están siendo víctimas el presidente del Comité Nacional, el propio partido y muchos de sus dirigentes". En un comunicado del bloque de senadores de la UCR se denunció: «El kirchnerismo es sinónimo de corrupción, por lo cual Ernesto Sanz advirtió sobre la imperiosa necesidad de que se asuman los gravísimos temas que afectan la vida de la gente, en especial los más pobres, quienes ven la merma del Estado día a día». Así, trasladaron el debate sobre los planes sociales a un Gobierno que «elude su responsabilidad en la corrupción, con cada día más funcionarios denunciados, y en la promoción del juego, cuyo crecimiento alcanzaría el 4,5% del Producto Bruto». A esa acusación se sumó el bloque de diputados radicales, incorporando el narcotráfico a la agenda. «No escuchamos una sola voz oficial que explique el incremento de los bingos y casinos en cada punto de nuestro país y el formidable negocio que supone para algunos empresarios del juego amparados por la administración Kirchner. Tampoco se dice nada sobre el exponencial crecimiento del consumo de paco en los grandes conglomerados urbanos y la ausencia de política oficial en la materia, y mucho menos se explica la relación entre el narcotráfico, la efedrina y el financiamiento de la campaña de Cristina de Kirchner», dice un comunicado del bloque. El apoyo a Sanz tras los ataques del Gobierno en sus declaraciones sobre los fondos que reciben los padres en la asignación universal, terminó cerrando cualquier posibilidad de diálogo con el kirchnerismo. Desde ahora la UCR presionará para que las comisiones investiguen en el Congreso cada una de esas denuncias, y en algunos casos que se constituyan comisiones investigadoras especiales. Por otra parte, los casos de corrupción en el oficialismo y su vinculación con el patrimonio presidencial terminan de cerrar el círculo sobre la turbia relación entre drogas, juego y poder.

CRONOGRAMAS DE EVENTOS DEL BICENTENARIO





VIDEO REALIZADO PARA EL ACTO DEL LUNA PARK DEL DIA 27 DE ABRIL DE 2009

Hugo Yasky, sobre los dichos de Sanz

“Son declaraciones de un troglodita conservador”




El titular de la CTA criticó duramente al senador Ernesto Sanz luego de que el diario Tiempo Argentino revelara que el radical señaló: “Por la Asignación Universal por Hijo aumentaron el consumo de droga y el juego”.

El secretario general de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), Hugo Yasky, calificó al presidente del Comité Nacional de la UCR y senador nacional Ernesto Sanz de "troglodita conservador” luego de que el legislador dijera que "por la Asignación Universal por Hijo aumentaron el consumo de droga y el juego”.

Para Yasky esas declaraciones "son propias de un troglodita conservador, de un intolerante frente a los avances sociales y la posibilidad que hoy tiene el sector más castigado por las políticas que promovieron estos personajes nefastos de la derecha argentina”.

El líder de la CTA sostuvo al diario Tiempo Argentino que "las estadísticas muestran que se elevó la matrícula escolar casi un 25 por ciento, se elevó el consumo de alimentos y de artículos de primera necesidad en las cadenas de supermercados chinos, que son a los que acceden principalmente los sectores más humildes”.

Para Yasky las declaraciones de Sanz realizadas este fin de semana a una radio de Santa Fe "constituyen una verdadera infamia”.

EDGARDO DEPETRI




COMUNICADO DE PRENSA

Declaraciones del Presidente de la UCR sobre la Asignación Universal

“Sanz es violento y autoritario y añora

las políticas de ajuste y represión”

“Son reaccionarias e irrespetuosas y demuestran el desprecio que este personaje de la política siente hacia los sectores más humildes”, dijo Edgardo Depetri respecto a las declaraciones del senador nacional y presidente de la UCR, Ernesto Sanz, acerca de que la Asignación Universal por Hijo provocó el aumento del consumo de drogas y de la recaudación de las salas de juego.



El Subsecretario de Relaciones con la Sociedad Civil de la Secretaría General de la Presidencia de la Nación destacó que la asignación universal es una de las medidas más trascendentes de este Gobierno porque sacó de la pobreza a casi dos millones de personas y de la indigencia a otro millón y medio y produjo un aumento del 25 por ciento de la matrícula escolar. Depetri dijo también que “Sanz es violento y autoritario y un claro exponente de la derecha política que añora las políticas de ajuste y represión”.



Buenos Aires, 16 de mayo de 2010

“Crisis institucional en la ciudad”




Algunos bloques proponen plantear la interpelación de Mauricio Macri. Otros reclaman que se presente espontáneamente a dar explicaciones por su responsabilidad en las escuchas ilegales. También se habla de licencia y de futura renuncia.

El arco opositor completo –incluidos varios dirigentes nacionales– cuestionó a Mauricio Macri tras su procesamiento en la causa por espionaje ilegal. Un sector de la oposición porteña se propone plantear la interpelación del jefe de Gobierno (paso previo al juicio político), mientras que otros le reclamaron que se presente espontáneamente. La mayoría habló de “crisis institucional en la ciudad”, una definición a la que los macristas le huyen como a la peste. Desde el kirchnerismo, Juan Cabandié le exigió a Macri que dé un paso al costado y pida licencia hasta que se aclare su responsabilidad en las escuchas. Por su parte, el diputado de Nuevo Encuentro Martín Sabbatella advirtió que si la Cámara Federal confirma el procesamiento “Macri tendría que renunciar inmediatamente”. Y si no, pidió que se le inicie juicio político.

Los legisladores del bloque de Proyecto Sur, que lidera Fabio Basteiro, emitieron un comunicado conjunto en el que destacaron que el procesamiento tiene “serias consecuencias sobre la situación institucional de la ciudad”. “Macri deberá brindar las explicaciones pertinentes sobre los graves delitos que se le imputan en relación con las escuchas ilegales que motivaron su procesamiento. Se confirman las graves sospechas de que en la ciudad de Buenos Aires se quiso instalar un sistema de inteligencia clandestino”, remarcaron. En tanto, el diputado Claudio Lozano consideró que “la ineficacia del gobierno de Macri ha llegado al límite de gestar con su propia política una verdadera crisis institucional”.

La diputada Victoria Donda, de Libres del Sur, estimó que Macri “tiene que dejar de poner excusas y hacerse cargo de su responsabilidad en la contratación y en el accionar de la gente que él designó”. “De una vez por todas, estos dirigentes políticos que no se cansan de hablar de república y de democracia deberían terminar con la práctica de violentar la ley”, cuestionó Donda.

“Si la Cámara Federal confirma el procesamiento, Macri tendría que renunciar inmediatamente a su cargo. Y si no lo hiciera, la Legislatura debe iniciarle juicio político”, remarcó Sabbatella, en una de las declaraciones más duras que se le han escuchado. Su bloque de legisladores presentó, en tanto, un pedido de interpelación a Macri. Entre ellos, Gabriela Cerruti estimó que “da tristeza y vergüenza que esto esté sucediendo en la ciudad. El jefe de Gobierno tiene que venir ahora a la Legislatura a dar explicaciones”.

En igual dirección se pronunciaron los legisladores de Diálogo por Buenos Aires, junto al de Igualdad Social, Martín Hourest. Aníbal Ibarra destacó que “Macri debería presentarse en la Legislatura para dar explicaciones”. El ex jefe de Gobierno remarcó que el líder de PRO “no pudo explicar por qué Jorge Palacios, su amigo y funcionario estrella, escuchaba ilegalmente a Néstor Leonardo, cuñado del jefe de Gobierno”. “Macri debería presentarse de manera espontánea en la Legislatura sabiendo que tal actitud le haría bien al equilibrio institucional que merece la ciudad”, destacaron Hourest y Epszteyn. Al enterarse de la respuesta negativa de Macri, Epszteyn advirtió que “Macri sigue despreciando el Poder Legislativo”. Además, recordó que “el bloque del PRO bloqueó la posibilidad de que la Legislatura tenga acceso a la causa”. Los opositores porteños querían solicitar una copia del expediente, pero el bloque macrista no habilitó el tratamiento sobre tablas.

Por su parte, el jefe del bloque kirchnerista de legisladores, Juan Cabandié, remarcó que el procesamiento “es de una gravedad institucional tan grande que no deja otro camino: Macri debe dar un paso al costado, debe solicitar una licencia en el ejercicio de su cargo, hasta tanto se aclare su situación procesal”. “La ciudad se avergüenza de su jefe de Gobierno”, acotó el kirchnerista Francisco “Tito” Nenna, quien consideró que “ya es tiempo de que la Legislatura avance sobre las responsabilidades políticas de Macri”. “Después de este fallo nos sentimos más inseguros que antes, ya que no sólo el ex jefe de la Policía Metropolitana y Ciro James están presos, sino que el propio jefe de Gobierno está procesado”, estimó el senador kirchnerista Daniel Filmus.

En su línea más cuidada, la Coalición Cívica consideró que “la oposición debe actuar con prudencia, responsabilidad y seriedad”. El titular de la CC-ARI Capital, Adrián Pérez, y el jefe de la bancada de la CC en la Legislatura, Fernando Sánchez, destacaron que “Macri tiene responsabilidad política en la designación del Fino Palacios al frente de la Policía Metropolitana y en su sostenimiento a pesar de las evidencias en su contra. Las explicaciones del jefe de Gobierno no resultan suficientes”. De todas formas, ratificaron que van a esperar a un fallo de la Cámara Federal antes de sumarse a una comisión investigadora por el caso de espionaje. En tanto, Sánchez advirtió que “las responsabilidades políticas de Montenegro no se terminaron con la falta de mérito”.

“El procesamiento de Macri ratifica una vez más la profundidad de la crisis institucional que atraviesa la ciudad”, destacó el titular del PS porteño, Roy Cortina. “Sin duda, esto demuestra que a Macri se le van acabando las excusas sobre la parcialidad del juez y el desconocimiento de James y no va a poder evitar responder ante la Justicia.” “Esta grave situación marca la necesidad de que la Legislatura se avoque al análisis de los hechos para determinar las responsabilidades políticas”, destacó.

Adelantado en la posición del juicio político, el legislador de MST-Nueva Izquierda Marcelo Parrilli ya presentó su proyecto de interpelación a Macri con las preguntas que le haría al jefe de Gobierno. “Por encima de Montenegro, él ideó e hizo de la Metropolitana una verdadera Federal II”, remarcó.

El día que Macri quedó PROcesado



EL JUEZ OYARBIDE CONSIDERO AL JEFE DE GOBIERNO PORTEñO INTEGRANTE DE UNA ASOCIACION ILICITA QUE SE DEDICABA A LAS ESCUCHAS ILEGALES



El juez federal Norberto Oyarbide procesó anoche al jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, por los delitos de violación de secretos, abuso de autoridad, falsificación de documentos públicos, en concurso con la participación en una asociación ilícita. En la causa por espionaje ilegal –revelado en su momento por Página/12–, el magistrado le imputó a Macri responsabilidad en la escucha que tuvo como víctima a su cuñado, Daniel Leonardo. Cuando se habla de falsificación de documentos públicos, hace referencia a que se armó una causa falsa contra Leonardo en Misiones para justificar la escucha telefónica ilegal. El procesamiento a Macri es sin prisión preventiva, pero con un embargo de 250.000 pesos. El juez también procesó a los dos jueces de Misiones, José Luis Rey y Horacio Gallardo, por los mismos delitos, y amplió la acusación contra Jorge “Fino” Palacios, acusándolo del espionaje en cinco casos más. Respecto del ex ministro de Educación porteño Mariano Narodowski consideró que fue encubridor, porque le firmó un contrato a Ciro James como asesor, sin que el espía hiciera trabajo alguno. Por último, el magistrado sobreseyó al ministro de Seguridad, Guillermo Montenegro.

No faltan quienes sostienen que Oyarbide tomó esta decisión para esquivar la recusación de Montenegro, que ahora llegó a la Cámara de Casación. Otros afirman que lo único que relaciona a Montenegro con el espionaje es que James estuvo en el ministerio varias veces y que había entrado a la Metropolitana, pero que no hay un elemento puntual, un interés específico, como el de Macri con su cuñado.

A las 20 de ayer, el juez convocó a las partes para firmar delante de ellos el fallo. Citó a los abogados de los imputados y al fiscal Alberto Nisman. Estaba también presente el secretario letrado, Gustavo Russo. Como los fundamentos son muy extensos, Oyarbide resolvió que recién los va a entregar a partir del lunes, por lo que anoche sólo firmó la parte resolutiva, es decir, los procesamientos y el sobreseimiento.

Desde el vamos, Macri trató de instalar la idea de que en el expediente no hay nada en su contra y que por lo tanto toda la causa es una maniobra política, supuestamente armada por el gobierno nacional en complicidad con el juez Oyarbide. Ayer, insistió con los mismos argumentos. Sostuvo que el procesamiento “estaba escrito antes de comenzar la causa” y que el kirchnerismo está “dispuesto a dañar” a todo aquel que se le oponga, en este caso él.

Sin embargo, quienes tuvieron acceso a la causa aseguran que no es común ver un expediente sobre espionaje con tanta cantidad de pruebas: jueces que armaron expedientes falsos por homicidio y robo, órdenes escritas para realizar las escuchas, un jefe policial que habla con el espía interviniente casi 200 veces, el mismo espía que retira personalmente las escuchas, un contrato falso en el Gobierno de la Ciudad y el espionaje contra un familiar directo.


Las imputaciones

Desde el punto de vista de la causa, a Macri se le imputa lo siguiente:

- Que en los últimos años Fino Palacios fue su policía de confianza, al punto que lo designó como jefe de seguridad de Boca Juniors durante su presidencia y lo puso a cargo de la Metropolitana ni bien armó esa fuerza. La ligazón con Palacios era tan estrecha que mantuvo su designación pese a que estaba a punto de ser procesado por irregularidades en la causa AMIA. Ni siquiera hoy desliza la menor crítica hacia el detenido Fino y lo sigue avalando.

- Ese jefe de su confianza tuvo un subalterno directo, Ciro James, con el que cruzó casi 200 llamadas en tres meses. Es decir, a un promedio de más de dos comunicaciones diarias. Palacios llevó a James a la Metropolitana, le iba a dar un cargo de importancia y se sabe que participaba en actividades de la fuerza mucho antes de ser designado.

- El vínculo entre Palacios y James también queda en evidencia en la escucha a Sergio Burstein, dirigente de Familiares y Víctimas del atentado a la AMIA. Eran los tiempos en que Palacios estaba a punto de ser procesado, de manera que a Fino le importaba muchísimo escuchar lo que hablaba Burstein sobre la causa AMIA, en especial con el fiscal Alberto Nisman. También puede deducirse que a Macri le interesaba la cuestión, porque necesitaba saber qué ocurriría con su policía preferido.

- Pero lo que acerca definitivamente el caso del espionaje a Macri es la escucha a Daniel Leonardo, su cuñado. Existía un serio conflicto familiar y el clan Macri quería probar, a través de las escuchas, supuestas preferencias sexuales de Leonardo. El objetivo –según cree el juez– era exhibirle las escuchas a Sandra Macri, la hermana de Mauricio, y convencerla de que se divorcie. Aunque nunca lo terminó de decir, Macri sugiere que esta operación de espionaje ilegal fue contratada por su padre, Franco. Ni el juez ni el fiscal creen que Palacios y Ciro James hubieran puesto en marcha la escucha sin el visto bueno de Mauricio.

- Para probar ese último vínculo, aparece la contratación de James en el Ministerio de Educación porteño, justito en la época en que se hicieron las escuchas a Leonardo. Y lo cierto es que no hay explicación para que le hayan pagado 6000 pesos por mes a James: no existe constancia de que haya hecho algún trabajo y los demás abogados contratados declararon que no lo vieron en el ministerio. Los dos especialistas de la Universidad de La Matanza que supuestamente recomendaron a James para ese trabajo negaron en forma categórica que lo hayan hecho y hasta dijeron que ni siquiera sabían que trabajara allí. Narodowski fue quien habló de la recomendación de los especialistas de la Universidad de La Matanza: terminó procesado porque el juez consideró que mintió y, por lo tanto, fue parte de la maniobra.

- Como un indicio más aparece un dato llamativo. Después de retirar las cintas con las escuchas a Leonardo, Ciro James aparecía usando el celular en la zona de Barrio Parque, justo donde viven Franco y Mauricio Macri. El juzgado determinó que en ese tiempo el padre estaba de viaje en China, por lo que consideraron ese dato como otro indicio más que vincula la operación de espionaje a Leonardo con Mauricio.

Cuando el jefe de Gobierno sostiene que su procesamiento estaba escrito desde el comienzo del expediente, la realidad es que efectivamente las sospechas apuntaban en su dirección. Es que en el centro de la escena estaba Palacios, con quien mantenía –y mantiene– un estrecho vínculo.

Macri también alega que la Policía Federal y la SIDE, es decir el gobierno nacional, fueron los que dieron origen a la causa. Es posible. El punto de partida fue una llamada anónima a la casa de Burstein y el individuo que llamó le dijo a la hija del dirigente de las víctimas de la AMIA que Fino Palacios le pinchaba los teléfonos. Lo concreto es que Oyarbide determinó que era cierto. Y las pruebas de que la escucha se estaba haciendo resultaron apabullantes.

El otro argumento de Macri es que seguramente James espiaba con anterioridad, cuando revistó durante años en el área de Inteligencia de la Policía Federal. También es posible y Oyarbide lo está investigando. Lo cierto es que la maniobra de espionaje ilegal se descubrió en 2009 y funcionaba en ese momento en la órbita del jefe de la policía de Macri y espiaban a un cuñado del jefe de Gobierno. Una interpretación es que Macri usó un aparato de espionaje que podría estar funcionando de antes.


El resto

Oyarbide sorprendió ayer respecto de la ampliación del procesamiento contra Palacios. Se esperaba que definiera su papel como jefe de la asociación ilícita, algo que tácitamente le pidió la Cámara Federal. Según dicen los allegados al juez, el magistrado todavía no está en condiciones de definir los roles dentro de esa asociación: no puede certificar quién fue el jefe ni quién el organizador. Por ello, la ampliación del procesamiento es sólo porque le añade responsabilidad en el espionaje ilegal de otras cinco personas.

La situación de Narodowski se complicó a raíz de las declaraciones de Cristian Cabral y Rolando Echave, de la Universidad de La Matanza. El ex ministro de Educación los mencionó como las personas que recomendaron a James. Cabral y Echave no sólo lo negaron. Ambos dijeron que ni sabían que James trabajaba en el ministerio porteño y contaron que ellos mismos concurrían a dar un asesoramiento en la cartera de Narodowski y nunca vieron allí a James. Otro elemento de peso: el contrato de James no se publicó en el Boletín Oficial, otra evidencia de que se encubría algo.

El sobreseimiento de Montenegro circulaba como una posibilidad en las últimas semanas. También se especulaba con que Oyarbide le dictaría una falta de mérito, para que el ministro continuara bajo investigación. En Comodoro Py había quienes pronosticaban el sobreseimiento esencialmente porque de esa forma pasa a ser abstracta la recusación de Montenegro al juez. Ya no está acusado de nada, no hay razón para recusarlo. El ministro nunca estuvo demasiado de acuerdo con la designación de Palacios al frente de la Metropolitana –Fino fue puesto allí por Macri– y entre los espiados no hay ninguno que parezca de interés específico de Montenegro. Por supuesto, también está el argumento de que los dos protagonistas principales de la asociación ilícita, Palacios y James, revistaban en ese ministerio. Por eso, pese al sobreseimiento del juez, Montenegro será interpelado el martes próximo en la Legislatura porteña.

El procesamiento de los ex jueces misioneros Horacio Gallardo y José Luis Rey estaba cantado. Se les imputan los mismos delitos que a Macri: participar en una asociación ilícita dedicada a escuchar ilegalmente. La responsabilidad de los ex magistrados consistió en convalidar expedientes falsos por homicidio y robo. Sobre esa base libraban órdenes a la SIDE para que intervinieran teléfonos y la realidad es que ni siquiera incorporaron las escuchas a los expedientes. Las cintas las retiraba James de la SIDE y se las quedaba.