“Europa se dio cuenta de que su norte puede ser nuestro sur”

El presidente brasileño destacó las coincidencias entre su gobierno y el de Uruguay y reivindicó el compromiso de ambos países para defender a los pobres y oprimidos. También afirmó que la región cambió, pero “rescató su autoestima”. Después de dejar la silla vacía en la cena que la presidenta del Brasil, Dilma Rousseff, compartió esta semana con Barack Obama y sus antecesores en el cargo, el lider del Partido de los Trabajadores (PT) y ex jefe de Estado norteño, Luis Inácio Lula Da Silva decidió hablar. Su tribuna fue montada por sus amigos del Frente Amplio de Urguay, que ayer en Montevideo celebraron los 40 años de la fundación de la coalición que gobierna el país desde el 2005. El 26 de marzo de 1971 el fallecido general Líber Seregni y los principales líderes sectoriales de entonces (Zelmar Michelini, Rodney Arismendi, Juan Pablo Terra, entre otros)- también fallecidos- realizaron el primer acto público de la variopinta alianza de izquierda uruguaya. Fue en la explanada municipal de Montevideo, el mismo lugar donde se planeó hacerlo ayer pero por amenazas de lluvia debió trasladarse al Palacio Peñarol, un gimnasio cerrado con capacidad para unas 7.500 personas cuya capacidad estuvo casi colmada. El diputado del Frente para al Victoria, Edgardo Depetri y Oscar Laborde –ambos del Frente Transversal– y una delegación de la Unión Cívica Radical afín a Ricardo Alfonsin marcaron la presencia argentina en el acto. Depetri, quién luego del discurso tuvo un encuentro con Lula, expresó: Creo que esta es la unidad que tanto soñó Néstor Kirchner y que todos los presidentes progresistas del continente vienen alimentando desde el entierro del Alca en Mar del Plata. Realmente estamos orgullosos de este reconocimiento a la memoria de Néstor. Y Lula tiene esa magia que deslumbra. Es por sobre todo, un trabajador. Y no sólo le dijo no a Bush. Lula le dirá no a todo lo que antente contra la soberanía e independencia de nuestros pueblos. Cruzar unas palabras con él, es un honor. Asì lo siento" Hubo discurso pero antes hubo además, de una emotiva carta con especial reconocimiento al presidente uruguayo, José Mujica, de parte de la presidenta Cristina Fernández. Saludos similiares se leyeron de los mandatarios Hugo Chávez, Rafael Correa y Evo Morales. El presidente Mujica, su antecesor Tabaré Vázquez, y casi todo el gabinete ministerial del actual gobierno siguieron el discurso de Lula desde primera fila. Ovacionado una y otra vez durante su intervención, Lula dijo que “muchos países tiene problemas económicos pero Uruguay, con el gobierno del Frente Amplio, no entregó las generaciones futuras”. También opinó que la región cambió, nuestra America del Sur tambien cambió “pero rescató su soberania, su autoestima”. “Pudimos crecer mucho económicamente, y hacerlo de forma sustentable y siempre el gobierno brasileño y el gobierno uruguayo combatimos la pobreza. Tenemos mucho para festejar, para celebrar”, comentó. Tras elogiar a Vázquez y Mujica y manifestar que desarrollaron y desarrollan políticas semejantes a las que, dijo, aplicó desde Brasilia en los últimos ocho años comparó al PT con el Frente Amplio, dos partidos que catalogó de “plurales, profundamente democráticos” y que saben combinar “la unidad de acción con la diversidad ideológica y mucha democracia interna”. Lula reivindicó lo que consideró su “compromiso” con los trabajadores y “los oprimidos”. A juicio del ex primer mandatario brasileño el Frente Amplio y el PT “supieron cambiar pero no cambiar de lado”. Señaló que no habrá socialismo “sin una profunda democracia pero tampoco habrá democracia política sin democracia económica y social”. Asimismo, convocó a elevar el nivel de coordinación entre los partidos de izquierda de la región y aseveró que los países europeos y desarrollados “se están dando cuenta ahora de que su norte puede ser nuestro sur”. En otro tramo de su discurso, Lula relató que “hace muchos años Uruguay veía a Brasil como país imperialista y también Brasil se veía como imperialista”, Entonces aseguró que Brasil no quiere “cambiar el imperialismo de los Estados Unidos” por el suyo y por eso ahora las empresas brasileñas se asocian con compañías de la Argentina, Uruguay, Bolivia, Venezuela y Paraguay. “No las compra, se asocia”, recalcó. Al cerrar su discurso, en el que no faltó el recuerdo a la derrota de Brasil a manos de Uruguay en Maracaná en 1950, algo que auguró que no se repita en el el 2014, Lula comparó las trayectorias comunes de Dilma Rousseff, Nelson Mandela y José Mujica, tres ex presos políticos que “no tienen rencor en el corazón”. “Ustedes son los verdaderos vencedores”, sostuvo. El presidente del Frente Amplio, Jorge Brovetto, fue el encargado de cerrar la oratoria.